HABLAR es fácil...
pero CALLAR
requiere prudencia y dominio.
Debemos aprender primero a CALLAR
para luego poder HABLAR.
RECUERDA SIEMPRE:
Que tus palabras sean más importantes
que el silencio que rompes.
Debemos aprender primero a CALLAR
para luego poder HABLAR.
RECUERDA SIEMPRE:
Que tus palabras sean más importantes
que el silencio que rompes.